
¿Qué está pasando con la economía y cómo afecta a la inversión inmobiliaria?
La actual “crisis” se atribuye principalmente al impacto global de la pandemia, con factores como cierres de fábricas, aumento del precio del petróleo y conflictos internacionales generando una inflación base. En Chile, problemas como el estallido social y la crisis política también contribuyeron, aumentando el desempleo y llevando al gobierno a implementar medidas como los retiros de la AFP y bonos.
Para controlar la inflación, el Banco Central aumentó la tasa de política monetaria, dificultando la calificación para créditos hipotecarios y reduciendo la inyección de capital al país. Sin embargo, esto crea oportunidades en el mercado inmobiliario. Con ventas afectadas y acceso al crédito más restringido, los inversores pueden aprovechar descuentos y facilidades de pago. Además, la alta demanda de arriendo surge, beneficiando a aquellos que califican para créditos de inversión inmobiliaria.
Dejar los ahorros sin invertir es desaconsejable en tiempos de “crisis”. Invertir en propiedades, resguardando el capital en UF y obteniendo plusvalía, es clave. Es importante recordar que las condiciones económicas son cíclicas, y las tasas de interés fluctúan. La paciencia es crucial, ya que cuando las condiciones mejoren, los inversores pueden aprovechar el refinanciamiento para hacer sus inversiones aún más rentables.